Revelaciones sobre los atentados de 2004 y 2017 en España
Las recientes revelaciones sobre los atentados cometidos en 2017 en las ciudades catalanas de Barcelona y Cambrils plantean exactamente las mismas interrogantes que las anteriores –sobre el atentado de 2004 en Madrid. Y son las mismas interrogantes que se han planteado antes en otros países y sobre otros atentados. ¿Por qué siempre resulta, en todas partes, que los terroristas islamistas tienen relaciones con la OTAN?
RED VOLTAIRE | DAMASCO (SIRIA)
El 15 de julio de 2019, el diario español Público publicó, bajo la firma de Carlos Enrique Bayo, el inicio de una investigación en 4 partes sobre las relaciones entre el cerebro de los atentados perpetrados en 2017 en Cataluña y los servicios secretos españoles [1].
En España, los servicios de espionaje y de contraespionaje son miembros de la misma institución, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Aunque el CNI depende administrativamente del ministerio de Defensa, el director del CNI tiene rango de ministro.
Los documentos publicados por el diario Público demuestran que, al contrario de lo que se afirma en la versión oficial, el imam de Ripoll, el marroquí Abdelbaki Es-Satty,
estaba radicalizado desde mucho antes de los atentados;
los servicios de inteligencia españoles lo habían reclutado como informante;
los servicios de inteligencia españoles habían falsificado su expediente judicial para evitar que fuese expulsado de España como consecuencia de una condena por tráfico de drogas;
los servicios de inteligencia españoles le habían creado un «buzon muerto» para que pudiera comunicarse con el agente encargado de atenderlo;
los servicios de inteligencia españoles escuchaban los teléfonos de los cómplices del imam de Ripoll.
estaba radicalizado desde mucho antes de los atentados;
los servicios de inteligencia españoles lo habían reclutado como informante;
los servicios de inteligencia españoles habían falsificado su expediente judicial para evitar que fuese expulsado de España como consecuencia de una condena por tráfico de drogas;
los servicios de inteligencia españoles le habían creado un «buzon muerto» para que pudiera comunicarse con el agente encargado de atenderlo;
los servicios de inteligencia españoles escuchaban los teléfonos de los cómplices del imam de Ripoll.
Lo más importante es que todo lo anterior demuestra que
el CNI seguía a los terroristas paso a paso;
que el CNI conocía los blancos de los atentados;
que los terroristas seguían bajo la vigilancia del CNI al menos 4 días antes de pasar a la acción.
el CNI seguía a los terroristas paso a paso;
que el CNI conocía los blancos de los atentados;
que los terroristas seguían bajo la vigilancia del CNI al menos 4 días antes de pasar a la acción.
Cabe preguntarse entonces
¿Por qué el CNI no impidió los atentados?
¿Por qué mantuvo en secreto lo que sabía?
¿Por qué en 2008 –o sea, antes de reclutar a Es-Saty como informante– el CNI ocultó a la Guardia Civil lo que sabía sobre este individuo, protegiéndolo así de la investigación sobre el atentado perpetrado en Madrid el 11 de marzo de 2004, lo que los españoles llaman «el 11-M»?
¿Por qué el CNI no impidió los atentados?
¿Por qué mantuvo en secreto lo que sabía?
¿Por qué en 2008 –o sea, antes de reclutar a Es-Saty como informante– el CNI ocultó a la Guardia Civil lo que sabía sobre este individuo, protegiéndolo así de la investigación sobre el atentado perpetrado en Madrid el 11 de marzo de 2004, lo que los españoles llaman «el 11-M»?